Reseña: La abadesa de Crewe - Muriel Spark

Título: La abadesa de Crewe

Autora: Muriel Spark

Editorial: La bestia equilátera

Género: Realismo

Páginas: 160

Año: 2020

La abadesa de Crewe ocurre como un cuento de hadas exasperado, rica en circunstancias y detalles que gravitan en el lugar en que el título nos sitúa, entre religiosas que desplazan casi involuntariamente el conflicto y lo conducen, con cierta parsimonia dolorosa, de la pleitesía al agravio. Con una virtuosa precognición, la autora coloca en la novela un sistema de mensajes interno que socava rápidamente la información, la magnetiza con un método que tiene al mismo tiempo algo de político y algo de maléfico. El conflicto mismo no tarda en encontrar una importancia capital, pero es el tratamiento de los matices y los escrúpulos lo que asienta la reputación de Muriel Spark, una de las más geniales escritoras del siglo xx.

La obra trascurre en una monasterio; cuando la abadesa Hildegarde muere dos monjas se postulan para ocupar el puesto, ellas son: la hermana Alexandra, estricta, fiel creyente de los clásicos hábitos y con gran conocimiento sobre literatura inglesa. La opositora es Felicity, de clase media, quiere incorporar prácticas revolucionarios, tiene como hobby bordar y mantiene una relación indecorosa con el Padre Thomas (jesuita). Para conseguir el puesto tienen que ser elegidas por el resto de sus compañeras sin pedir el voto, por lo tanto Alexandra (en conspiración con tres amigas,Walburga, Mildred y Winifrede, que pretenden ascender en la jerarquía) y Felicity (apoyada por algunas novicias) realizan de manera brillante acciones para influir de manera discreta ante las demás.

"Tenemos que velar por nuestra seguridad y yo sola soy quien decide en qué consiste, según la Regla de San Benedictino. Soy conciencia y autoridad. Usted cumple mi voluntad y la lleva a cabo"

Los conflictos aparecen cuando Alexandra hace uso de un sistema electrónico escondido por toda la abadía (solo ella, sus aliadas y la difunta saben del asunto), por las escuchas ilegales descubre el amatorio prohibido de Felicity, para librarse de la joven informa a las autoridades eclesiásticas sobre el asunto pero al mismo tiempo no puede revelar como descubrió el pecado. Para ocultar la conspiración se generan dentro de la abadía varios enredos, entre ellos el robo de un dedal misterioso en poder de Felicity.

"Si tiene probabilidades de éxito, significa que la rebelión no es inmoral. La rebelión contra un tirano es inmoral solamente cuando no tiene la menor posibilidad de éxito"

Para complicar más el caótico panorama, desde el exterior Gertrude (en función de resolver conflictos religiosos o sociales internacionales) mantiene en reiteradas ocasiones conversaciones telefónicas con Alexandra, la enigmática monja la orienta sobre la manera en cómo resolver los problemas pero en realidad oculta un plan estratégico para conseguir lo que en verdad desea para ella y el convento.

"Apela a sus instintos más bajos -aconseja Gertrude- Dentro de las paredes del convento. Solo cuando exhortamos a los extraños fuera del convento apelamos a los más elevados"

La trama deja entrever de manera disparatada y absurda el poder que se esconde tras los muros de una iglesia: los estatus según la posición económica, las costumbres pacatas u ortodoxas, la cosmovisión conservadora los roles estructurados dentro de cada grupo/posición y la dominación por parte de la autoridad máxima. Como siempre M. Spark utilizó humor irónico. 

La construcción de los personajes es impecable, todas tienen personalidad, una manera particular de pensar y el aspecto psico no tiene desperdicio. Por último, la autora al incorporar espionaje y otros guiños, aludió en forma de parodia al caso Watergate.